El objetivo de cualquier sistema sanitario es proveer a los pacientes de aquellos servicios que mejor preserven o restauren su estado de salud. El eje central de la asistencia sanitaria es la práctica clínica, actividad que se concreta en tres puntos, el diagnóstico, el pronóstico y el tratamiento y se traduce en una constante y sucesiva toma de decisiones clínicas, en bastantes ocasiones en condiciones de incertidumbre y no exentas de responsabilidad.

El especialista en Medicina Interna es el clínico por excelencia. Por su formación multidisciplinaria, carácter integrador y concepción global del paciente, constituye el pilar fundamental de la asistencia hospitalaria. Es el médico general del hospital que contribuye al proceso de evaluación y clasificación de los pacientes pluripatológicos y a la coordinación entre niveles asistenciales.

Nuestra política de gestión está encaminada a desarrollar las habilidades necesarias para la consecución de nuestros objetivos. Nuestra actividad se desarrolla conforme a una filosofía de servicio cliente-proveedor y autonomía de gestión participando en el programa de Calidad Total que el hospital pueda impulsar. Esta política se ha basado en los siguientes apartados:

1. El paciente es el eje de todas nuestras actividades

2. Nuestros recursos humanos son nuestro principal valor.

3. La organización de nuestros recursos, humanos, materiales y económicos debe ser flexible y eficaz

4. Garantizar la realización de la actividad necesaria, buscando la eficiencia clínica, asistencial y económica.